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BIBLIOTECA NACIONAL. ENTREGA DE LOS PREMIOS NACIONALES 2006 A LAS BUENAS PRÁCTICAS EN BIBLIOTECAS ESCOLARES

 

Ayer estuvimos en Madrid, en la entrega oficial de los diplomas que acreditaban a los centros de enseñanza que vieron premiadas las trayectorias de trabajo de sus bibliotecas escolares, en la convocatoria de 2006.

 El acto comenzó a las 11 y media de la mañana en el salón de actos de la Biblioteca Nacional. Hubo reencuentros y saludos previos con amigas y amigos que se acercaron al acto o que habían sido premiados también.

Desde el CEIP Miguel Servet de Fraga fuimos a Madrid, el Director Juan José Pueyo y los dos responsables de la biblioteca escolar: Mercè Lloret y Mariano Coronas. Intervino, en primer lugar, Rosa Regás (como anfitriona, al ser la Directora de la B.N.). Seguidamente se leyó la orden ministerial de concesión de los premios. A continuación fuimos viendo unos vídeos, filmados en los centros ganadores de cada una de las categorías y se pasó seguidamente a la entrega de los diplomas. Mercè Lloret Barrau recogió, de manos del Secretario General de Educación y Ciencia (Alejandro Tiana) el correspondiente al Ceip Miguel Servet. Entregados todos los diplomas, leí el discurso de agradecimiento, en nombre de los premiados, que me habían encargado y cerró el acto el Secretario General. Luego nos hicimos algunas fotos y se sirvió un generoso ágape que fue muy bien acogido por los asistentes. El Diputado fragatino José Mª Becana nos acompañó en el acto y también estaba presente Carmen Martínez (Directora General de Política Educativa de la DGA).

Por la tarde, José Mª Becana, junto con la Diputada montisonense Mª Teresa Villagrasa, nos llevaron al Congreso de los Diputados y pudimos disfrutar de una tarde especial comiendo, visitando, caminando, departiendo por distintas zonas del edificio del Congreso. Especialmente agradable fue el saludo y el reencuentro con el amigo Labordeta. Bueno, y ya no quiero cargar más el texto, porque lo que quiero es dejar, a continuación el discurso que escribí y leí ayer en el salón de actos de la Biblioteca Nacional:   

“Quiero comenzar este breve parlamento, celebrando y agradeciendo la sensibilidad de las personas organizadoras de este acto. Realizarlo en una de las estancias de la Biblioteca Nacional, la Casa en la que se guardan todas las palabras que fueron escritas, me parece una decisión digna de ser reseñada y puesta de manifiesto.

 Igualmente quiero dar las gracias a quienes me han señalado y honrado con el breve cargo, pero muy agradable encargo, de hacer de portavoz de los representantes de las bibliotecas escolares premiadas en la convocatoria de 2006.  

Es evidente que los premios que aquí se van a entregar, distinguen a las bibliotecas escolares que han mantenido una serie de buenas prácticas relacionadas con la dinamización y la innovación. Hablamos, por tanto, de animación y fomento de la lectura y la escritura, de educación documental, de dinamización cultural de los centros, de estímulos a la participación. Pero no olvidemos que detrás de cada una de esas bibliotecas escolares hay personas; en algunos casos una o dos, en otros, algunas más, responsables de aportar la ración diaria de imaginación, trabajo y esperanza para hacerlas posibles, para que permanezcan vivas y sugerentes; para hacerlas definitivamente necesarias. Este reconocimiento, viene a darles la razón, a poner en valor su trabajo silencioso, a veces ignorado, otras obstaculizado, con frecuencia, no suficientemente valorado...  

Una biblioteca escolar debería ser, un espacio de encuentro de los miembros de la comunidad educativa. Un equipamiento escolar como la biblioteca, permite la democratización de los medios y materiales de aprendizaje; es compensadora de desigualdades; es un espacio civilizador y cooperativo para compartir tiempos, trabajos y lecturas; es depositaria de la memoria impresa del centro escolar y un lugar inagotable de aprendizaje; posibilita el acceso a diversas fuentes informativas y es potenciadora de los hábitos de lectura, de escritura, de estudio e investigación... Y creo, además, que una biblioteca escolar es también el conjunto de personas que la aprecian y la usan; la red de complicidades e intercambios que genera; los beneficios emocionales que provoca; las relaciones que estimula y alienta... Porque alrededor de la palabra leída, contada, escuchada, dibujada, imaginada... hay siempre beneficios invisibles o difíciles de explicar. 

Y a pesar de todo lo anterior, las bibliotecas escolares no tienen asegurado su futuro. Tienen que convivir, en un frágil equilibrio, con el libro de texto único; con metodologías de trabajo que las ignoran; con una crónica e injustificada invisibilidad; con escuálidos presupuestos para renovar fondos y aportar novedades; con la falta de formación del profesorado para usarlas y con la ausencia de bibliotecarios escolares que se ocupen de las mismas con un horario suficiente.  

Es indudable que estos premios y algunos planes estatales y autonómicos tratan de paliar esas carencias, pero todavía queda mucho por hacer.  Quienes llevamos ya unos años en estos menesteres, sentimos que el tiempo pasa, que vamos inexorablemente camino de la jubilación y que probablemente no podremos asistir en activo a la consolidación de algunos de nuestros anhelos. Pedimos, no obstante, que el Ministerio de Educación siga liderando a las Consejerías homónimas de las Comunidades Autónomas y juntos den un impulso definitivo a las bibliotecas escolares: ampliando y consolidando aquellas que han demostrado un eficaz funcionamiento y poniéndolas en pie allí donde todavía no existen. 

Estamos en un acto institucional de entrega de premios y, por tanto, ante una oportunidad de disfrutar de este momento. Es por ello que me gustaría reservar para la parte final de esta alocución la lectura de un pequeño ABCdario, de una relación alfabética de los efectos fantásticos que puede producir la biblioteca escolar. En su seno ocurren cosas realmente maravillosas; cosas que pueden percibirse con uno o con varios sentidos y que están al alcance de la mano, de los ojos o de la sensibilidad de quienes acuden a ella, porque en una biblioteca escolar:  

Acunan Afectos – Bogan Bucaneros – Cuentan Cuentos – Duermen Duendes – Enseñan Encantamientos – Fabrican Fantasía – Guardan Golondrinas – Habitan Héroes – Iluminan Ilusiones – Juntan Júbilos – Leen Libros – Muestran Magia – Navegan Narraciones – Ofrecen Oralidad – Paladean Palabras – Reavivan Rescoldos – Susurran Secretos – Tejen Tolerancia – Untan Ungüentos – Voltean Versos y Zarandean Zurrones llenos de palabras, de historias y cuentos.  

Gracias, muchas gracias en nombre de todos los que nos sentimos premiados y premiadas, ¡salud y buena lectura!” 

(Mariano Coronas Cabrero – Madrid, mayo de 2007) 

P.D. Y como en la vida son necesarios los contrapuntos, para equilibrar la posible euforia, visitamos, en el Congreso de los Diputados, la exposición fotográfica "IMÁGENES Y MEMORIA DE MAUTHAUSEN": "imágenes que nos permiten observar las condiciones inhumanas de vida y trabajo de los internados, así como la cotidianeidad de la tarea de los verdugos, que se ensañaron con los 7.000 españoles internados en el campo..." Un homenaje a quienes perdieron la vida y el futuro bajo el salvajismo  más demoledor y planificado de los nazis... Ya en Atocha, para coger el tren, visitamos también el monumento a las víctimas del 11 de marzo; leímos sus nombres y las frases que sintentizan anónimamente la tragedia. La vida y la muerte; la alegría y la tristeza; la felicidad y el horror... caminan siempre de la mano, por si no lo sabías.

11 comentarios

Ana -

Muchas felicidades. Aunque tambien haya cosas no muy agradables que contar, estos reconocimientos ayudan a que se olviden.
Esto ayuda a nosotros como maestros y a los que la lectura es uno de nuestros principales aficciones.
Un abrazo.

kamile -

Mariano, menuda suerte has tenido. Pra mí sería un honor leer un discurso en la Biblioteca Nacional. Me habría encantado ir contigo y escuchar ese discurso en directo.
Felicidades Mariano, porque no todas las personas del munto tienen la suerte que has tenido tú.
Saludos a todos.

Mª Rosa SERDIO -

Querido Mariano:¡Por fin ya estamos content@s quienes queríamos la voz de un maestro en la Biblioteca!
Me ha encantado, desde mi corazón, verte allí en la Nacional, hablando como sólo un maestro sabe hacer: alto y clarito.
Sí, ya se sabe que hemos de repetir varias veces las cosas por si algun@ de l@s de atrás no se ha enterado pero...Te prometo que, por mi parte, hay voz y ganas de continuar haciéndolo.Un deseo de felicidad para vosotr@s y un algo pequeño para l@s niñ@s: sabed del tesoro que se os ha dado.Aprovechadlo con el corazón abierto.Besos de Rosa.

Mariano -

Gracias a todas y todos los que habéis escrito los comentarios anteriores.
Para Mercè y para mí fue un día realmente especial. Los dos, codo con codo, llevamos diecinueve años y algo más impulsando la biblioteca escolar. Sabéis que no ha sido un camino de rosas, precisamente, y que hay muchas cosas que contar (y no precisamente agradables). Algún día habrá tiempo para escribir la triste historia o la negra historia de las bibliotecas escolares... Hasta ahora, todas las personas que he conocido con años de dedicación a ellas, en algún momento de la conversación, han expresado su amargura por algún episodio vivido con el entorno más próximo de trabajo. Por eso, poder recibir este premio y poder leer un discurso en la Biblioteca Nacional, nos han reconfortado mucho... Y, de momento, seguimos en la brecha, seguimos trabajando como si nada hubiera pasado porque nuestro convencimiento y compromiso es profundo y vieja nuestra dedicación hacia la biblioteca escolar y todo lo que genera.
Gracias a todas y todos por tantas palabras de ánimo y de felicitación.

Ana Jesús -

Querido amigo:
¡Que discurso tan acertado! No puedo estar más de acuerdo; muchas gracias por expresar de forma tan contundente y elegante lo que pensamos tantas personas que disfrutamos y sufrimos los beneficios y sin sabores que se generan en las bibliotecas.
Muchas felicidades. Eres un maestro.

José Luis -

Precioso discurso y precioso ABCdario final. Ya no sé dónde guardar tantas maravillosas lecciones. Debiera pedir un traslado a Fraga.

Respecto a Mathausen, el año pasado leí un libro, que recomiendo, llamado el Convoy de los 927, donde se narran las espeluznantes vidas de algunos presos españoles en este campo de concentración nazi, tras escapar de España, ser maltratados en Francia, etc.

Un saludo para las personas que hacen de las bibliotecas un lugar luminoso y fascinante.

Leticia -

Buenas noches a todos los que aún estéis despiertos y buenos días a los más sensatos que leerán esto mañana después de haber descansado en condiciones.

Mariano, me sumo de nuevo a las felicitaciones por tu discurso. Supiste ponerle palabras a lo que todos pensamos, nos facilitaste la tarea, como tantas veces, de denunciar elegantemente la situación por la que pasan las bibliotecas escolares en este país. Y supiste ponerle el mejor broche posible: esa huella tan personal de tus abecedarios, que se han convertido ya en la versión literaria de tu carnet de identidad.

Aprovecho esta ocasión para felicitar también públicamente a Mercè, sin duda el más valioso de tus abecedarios, por tantos años de trabajo y compañía tan sólidos. Enhorabuena a los dos.

Un besazo.

Leticia

Mª Carmen Cano -

¡CHAPÓ!Me encanta, siempre tienes las palabras adecuadas.
Espero que tomen nota en Madrid y el resto de comunidades y ayuden a los que queremos que las bibliotecas escolares no sean una utopía, sino una realidad en todos los colegios. Felicidades nuevamente, os mereceis este premio y muchos más, aunque el mejor de los premios es ver a nuestros niños y niñas disfrutando con la lectura y los libros.

Blanca -

Estimado Mariano: ya en su día te felicité, pero este texto es precioso. Gracias por todo lo que nos enseñas cada día.
Las Bibliotecas escolares necesitan gente como tú.
Muchas gracias otra vez desde Santander.Un abrazo Blanca

Fina -



M U C H A S F E L I C I D A D E S

Rosa Piquin -

Querido Mariano,
agradezco profundamente este discurso tan rotundo , claro y alentador de lo que las bibliotecas escolares (y las personas que estamos detrás) representamos y queremos ser para la educación de los niños y niñas de este variado y plural pais nuestro.
Tus palabras, el ABCdario, me han reconfortado, siento que yo también estuve allí con vosotros, con Mercè y contigo, con Laura y Chusa, con Leticia y Julia- acompañadas, !es todo un detalle!, de Dolores Guerra, nuestra Directora General (ya es el segundo año que acompaña a los premiados asturianos, y eso poco a poco parece que lo vamos a ir notando en el día a día ),se que también estaban Pepe y Carmen de Málaga...
¿Crees que Tiana y su equipo, las personas representantes de las distintas Autonomías habrán tomado buena nota de tus peticiones?
Yo también confío en que antes de que Rosa Serdio y tú os jubiléis podamos ver que las Bibliotecas Escolares se consolidan , en las condiciones que planteas en tu franco discurso.
Besinos y un fuerte abrazo