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Visita de Gonzalo Moure

Hoy nos ha visitado en clase, el escritor y amigo Gonzalo Moure. Ayer por la tarde estuvo en el Palacio Moncada de Fraga. Hasta allí se acercaron cinco chicos de la clase: Iosu, Sebas, Javi Navarro, Daniel y Énder que le preguntaron por todo lo divino y humano y a quienes firmó libros, dedicatorias, autógrafos… Hoy por la mañana, a primera hora, hemos estado hablando de ello. Los asistentes a la reunión de ayer nos han contado su alegría por hablar con él y esa ha sido hoy la noticia que hemos escrito en nuestro “Cuaderno de noticias”. El pasado curso leímos en voz alta los libros: “El oso que leía niños” y “Palabras de caramelo”. Con el primero hicimos algunos trabajos que le enviamos por correo postal. Más adelante, Gonzalo nos escribió un correo electrónico agradeciendo las palabras que le dedicábamos. Este curso, relacionado con el tema “Pueblos y culturas” trabajado desde la biblioteca escolar, hemos leído “Maíto Panduro”.

A media mañana, nos han comunicado que iba a venir a vernos Gonzalo. Ha llegado cuando terminaba el recreo, acompañado por Carmen, y hemos subido todos con él hasta la clase. No ha necesitado ninguna presentación y, al hilo de lo que ayer le contaron, se ha puesto a hablar de la vida, como si nos conociera desde siempre. Les ha dicho algunas cosas importantes: “ahora os coméis las manzanas, pero estará bien que más adelante, decidáis plantar manzanos, para que otros puedan probarlas”. Este bienestar en el que estamos instalados no debería convertirnos en seres pasivos; todo lo contrario; puesto que tenemos nuestras necesidades básicas cubiertas, deberíamos poner más empeño en comprometernos con algunas causas y leer y prepararnos para realizar nuestros sueños, con una proyección hacia otras personas.
Gonzalo ha escrito ya una extensa obra literaria. Además de los libros nombrados más arriba, podemos citar: “Lili, libertad”, “El movimiento continuo”, “Los caballos de mi tío”, “¡A la mierda la bicicleta!”, “El síndrome de Mozart”, “Nacho Chichones”…
La visita ha sido de media hora; los chicos han escuchado con mucha atención su ameno parlamento, le han pedido los correspondientes autógrafos y se han hecho una foto con Gonzalo. Seguro que recuerdan ese momento como algo muy especial; sobre todo, algunos a quienes se les veía emocionados con la visita. Los compañeros y compañeras de 6º B también han pasado un momento a la clase para saludar a Gonzalo, pues ellos también habían leído alguno de sus libros. Tras esta visita sorpresa tendremos la oportunidad de seguir leyendo sus libros, para conocer a los personajes salidos de su imaginación y para seguir el hilo de las historias imaginadas por Gonzalo, a quien agradecemos enormemente que haya hecho un hueco en su apretada agenda y haya venido a visitarnos. Con su visita, este martes vulgar, se ha convertido en un día lleno de significado.
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P.D.- Mi padre cumplió ayer (25 de abril) 87 años. Sigue cuidando la huerta y se dobla sobre los surcos de manera envidiable. En las arrugas del rostro está dibujado el mapa de toda una vida y sus manos empuñan con fuerza y decisión las herramientas que necesita para sembrar y plantar. Me enseñó el valor del esfuerzo y el trabajo para ganarse el pan de cada día y el valor de la dignidad como capital personal. ¡Felicidades!

5 comentarios

MARTA BASOLS -

Hola, Gonzalo Moure:

Soy Marta y me ha gustado que nos vinieras a ver a la clase. Me has caído bien.
Sí es verdad que tú y Mariano os parecéis en el carácter, porque coincidís en las cosas que decís. Ya le he contado a mi familia lo de tu visita y lo que me has dicho sobre mi nombre. Mi madre me ha dicho que el año pasado estuviste en el IES Bajo Cinca, para hablar sobre tu libro “El síndrome de Mozart”. A ella le pareciste un tipo estupendo. Yo tengo un hermano que se llama Jorge y tiene 16 años. A él le gusta mucho la música, toca la trompeta y la guitarra y está en la Banda de música de Fraga y baila jotas en la Rondalla de la Peña Fragatina.
A mí me gusta leer con mi madre y todas las noches, antes de dormir, leemos. Ahora estamos leyendo un libro titulado Nube de Noviembre. La semana pasada tuvimos la “maleta familiar”; por si no lo sabes, la ha preparado Mariano para que en casa compartamos con los padres la lectura, un vídeo, música, etc.
Nosotros tenemos un tutor (Mariano) al que le gusta mucho la lectura y casi todas las mañanas nos lee algo y nos hace buscar información sobre noticias que luego comentamos. A mí me paree que tenemos un tutor estupendo, aunque, a veces, nos hace trabajar duro.
Me despido con cariño, pero ¡un momento! Te escribo el principio de una historia inventada para que tú la continúes:

“Eran las siete de la mañana. Era el primer día que iba a acudir al instituto. Estaba ilusionada, pero muy preocupada…”

Un abrazo.

AINHOA ECEQUIEL -

¡Hola, Gonzalo!

Me gustó la visita que nos hiciste ayer y me hizo reflexionar sobre la vida o lo que tengo. Al principio, me asusté; cuando te vi, dije: ¡qué alto! Y además estás lleno de vitalidad.
Yo no sería capaz de arriesgarlo todo por lo que me gusta. Por ejemplo, en el librito, “¿Qué quiero ser de mayor?”, escribí lo que quería ser cuando era pequeña; porque en realidad quería ser actriz o presentadora de algún programa educativo, pero lo que de verdad me gusta es el teatro, pero tengo un poco de vergüenza. Además, tengo pocas posibilidades de triunfar.
Bueno, dejemos eso y ahora te voy a poner a prueba con lo que dijiste ayer. Invéntate tú una historia (si puedes y tienes tiempo), a partir de este trozo:

“Soy Elisa y tengo 13 años. Me gusta leer, pero mis amigos creen que es una tontería. Yo no lo entiendo…”

Y me despido así:

“En un colegio de Fraga, de cuyo nombre no me acuerdo, enseñaba un maestro llamado Mariano, de origen montañés (de Labuerda). Un día fui a verles y a darles una charla, y allí se quedaron todos escuchando con atenta mirada”. Un abrazo.

HOUDA MOUMEN -

Querido Gonzalo Moure:

No sé si te lo has pasado bien en Fraga, pero con nosotros, seguro que sí. Me gustó como hablabas, con amabilidad y respeto. Esta es una poesía que te he dedicado personalmente a ti:

Ayer conocí a un hombre
simpático y no veas su nombre…
Es un buen escritor
y tiene un amigo pintor.
No vive en Extremadura
pero tiene una vida muy dura.
Mariano es amigo de él
y quieren ir a Israel.
Cuando vino a Fraga
subió a mi cole por la mañana.
Un día perdió su chaqueta,
pero encontró una raqueta.
Cuando se tenía que ir,
se empezó a reír.

Prefiero conocer a un escritor que a un famoso. Ya sabes que en clase hemos leído libros tuyos. Si hubiéramos sabido que venías hubiéramos preparado unas preguntas, una poesía o algún regalo. Estoy contenta porque nos hemos podido conocer. Un gran abrazo.

FIAMA ARROYO -

Hola, querido escritor:

Soy Fiama, la alumna de Mariano. Primero te tengo que decir ¡gracias! Por venir aquí a clase; ¡gracias! También por charlar con nosotros. Eres una persona especial para mí, porque me has enseñado que no importa el dinero, sino que lo importante es hacer una acción buena. Lo que dijiste de que tú no has tenido miedo y que no te has rendido nunca, yo lo he pasado como la varicela. Pero ahora ya no lo tengo porque tú me has dado la medicina para esta enfermedad. Me ha encantado que vinieras a vernos y eso me ha hecho muy feliz. A mí también me gustan las poesías, como a Daniel. Incluso hago algunas estrofas con rimas a mis padres y amigas. Como tú has dicho, la vida no es un camino de rosas porque te tienes que esforzar y trabajar. Me hasn gustado mucho tud libros “Palabras de caramelo” y “Maíto Panduro”; espero que también me guste el próximo que lea. ¡Ah!, se me olvidaba, puedes poner mi nombre donde quieras y me alegro mucho que te haya gustado. Yo creo que me pusieron Fiama porque cuando estaba en la tripa de mi madre, habían adivinado que me gustaría la pasta y la pizza. Haz todo lo que quieras con mi nombre, pero no lo desgastes, sino acabaré llamándome “F”. Espero que algún día volvamos a vernos. Bueno, Gonzalo, hasta otro día. Adiós.

Herminio Lafoz -

Y qué bien te enseñó tu padre, pardal.